martes, 27 de marzo de 2007

pequeñas tretas

Música: insurrección - El Último de la Fila (Enemigos de lo Ajeno 1986- Nuevas Mezclas 1987)

Martes frío, anodino y gris. Ando metido en algunos proyectos, que unidos al hecho de tener a Manu en casa estos días, hacen que escriba poco, más por falta de temas de los que hablar que otra cosa. Nos pasamos los días tonteando, viendo series acurrucados en la cama, mirando la vida pasar y disfrutando del roce el uno del otro. Cuando no está él, trabajo y más trabajo. He tenido que buscarme algunos extras para poder afrontar la escasez económica, motivada sobre todo por los dichosos contratiempos que se vienen sucediendo desde primeros de año, y porque en junio se me casa una hermana, y hay que ir ahorrando para la esplendidez. De los contratiempos, esta vez le ha tocado al frigorífico... Decía un amigo que tanto desperfecto es señal de que esta casa se ha cansado de mí. Es para pensárselo... aunque aguantaré, ya que por ahora, no pienso dejarla libre. Y tanto entretenimiento hace mella en la inspiración, como se puede comprobar. Cualquiera que lea podrá comprobar los pocos asuntos que tengo últimamente en lo que a narrativa se refiere.

Como esta ausencia de inspiración la suplo bien con los vídeos, aquí dejo una gran joya de canción. Tras un vídeo que a algunos les puede sacar una sonrisa (eran otros tiempos, esos 80) y a otros una carcajada a la cutrez, se esconde la que para mí es una de las mejores canciones de todos los tiempos. En apenas catorce líneas se esconde todo un himno generacional, una carga de connotaciones y poesía en estado puro. Para mí, esta cancion recuerda noches de verano subido en una derby, acompañado de los ligues de entonces, en un mirador oteando la ciudad dormida. O noches de conciertos, sobre todo los míticos del Zaidín de los años 90, donde se mezclaba alcohol, drogas, colegueo, peleas, y mucha inocencia interrumpida de un chaval de dieciseis años por esas calles de Granada, que tanto han visto, y tanto han cambiado. Es como recordar otra vida... una joya, lo dicho.



jueves, 22 de marzo de 2007

ya es primavera en...

En Granada, claro, porque en el Corte Inglés empezaría allá por las Navidades :-)

Y dirán... ya nos hemos dado cuenta, nada más que ver el calendario... pero no, en Granada empezó el domingo o lunes, no lo se bien, y fué de repente, improviso, tan improviso como ir yo por la calle, levantar la vista y... allí estaba, limpia, pulcra y con el esplendor que le dan los años de mantenerse fiel a su cita con los de aquí, y con los de allí.

Hablo, por supuesto, de Los Italianos, la mejor heladería, ya no de Granada, sino de Andalucía y casi del mundo entero. Y si pensais que es una exageración, es que no habéis probado la suave textura de la stracciatella, con sorpresitas de chocolate en los vasos de litro que preparan todas las mañanas, recién salidos de la heladera... o la cassatta, famosa en el mundo entero... los barquillos de pistacho o la inigualable giandugia...

Es un placer para el paladar, casi lo llamaría pecado.

Y que abran los Italianos es señal de que ya llega el buen tiempo, los tambores de Semana Santa acompañados por las perdices (patatas asadas) de Plaza Nueva y el postre de una tarrina de a euro, con esas cucharillas tan características. Que oficialmente, y antes de cambios de hora, ya es primavera en Granada. Atrás queda pasar por esta acera, con el abrigo abrochado hasta arriba y mirar de reojo a la castañera que dejan en el escaparate, para recordarnos que cada día que pasa, es un día menos para el reencuentro.

No dejéis de pasar por Gran Vía los que vengáis de fuera, no os arrepentiréis.

Por cierto y al hilo de esto, he pensado en Juan, que seguro que desde Valencia tiene que estar acordándose de los Italianos. Con él me tomaba el primer helado de la temporada. Va por ti Juanito :-)

martes, 20 de marzo de 2007

en paz descanse

Yo: Que tal nene, como van los alfileres?
X: Pues bien, ayer ya la subí al paso
(Una conversación cualquiera de messenger)

Para los entendidos en temas de Semana Santa, son frases familiares. Para los que no sepan nada de la idiosincrasia andaluza en estas fechas, la traducción sería algo así como... ¿como llevas el vestir la imagen para la procesión de Semana Santa? -en Andalucía, hay unos señores llamados "vestidores" que su función principal es el atuendo de las imágenes que se procesionan- Pues bien, ayer ya empezamos con el montaje de los pasos (tronos, altares móviles... como se les quiera llamar en el resto del mundo).

A día de hoy, me acabo de dar cuenta de lo cercana que está esta celebración, que prácticamente paraliza media Andalucía, y de la que yo he mamado mucho siempre, y ando ahora más desvinculado, por motivos varios.

No voy a hablar de la Semana Santa de Granada, eso lo dejaré para más adelante; entonces.. ¿a qué este comienzo?. Viene al hilo de que el tiempo se echa encima, y necesitaba actualizar información que, por mi crisis creativa que me está afectando bastante, no sólo en lo personal sino también en lo profesional (cosa mala) y la pereza de escribir, hacía que noanotase los últimos eventos acaecidos en la ciudad de la Alhambra, y en concreto el que hoy ocupa, y es que si no lo pongo ahora, más adelante, no pega (ya de hecho casi que no pega). Así que sin mucha inspiración y más al estilo gacetilla curiosa, cuento lo que fué el Entierro de la Sardina, celebración con la que finalizamos el Carnaval el pasado 21 de febrero.

F. de Goya: Entierro de la Sardina

En un principio la idea era contar de dónde viene este evento pagano, pero que quereis que os diga... hay que darle trabajo al Google así que los interesados que lo busquen. Yo solo mencionaré que la fiesta que se celebró en el Bar Reca, aquí en Granada, fue... como diría yo queridas amigas... rescatar una petarda tradición no ancestral que se venía haciendo hace años, en el ya mítico "Pie de la Vela", pub gay de Granada que desgraciadamente cerró sus puertas años atrás, y en el que muchos de aquí, y de fuera, de ya una cierta edad pasamos noches inolvidables de verano bebiendo y enamorándonos (por ser fino). Los más jóvenes no sabrán de qué iba la historia... ellos desgraciadamente se lo perdieron :-)

Por aquel entonces, lo más granado y marujil del ambiente granadino se daba cita cada martes antes de Cuaresma, para dar entierro a la sardina, y de paso, lucir los más impresionantes y kitsch oropeles, competiciones de quién era la viuda más guapa (o más drag o más patética), formar corrillos de curianas y destripar los trajes que luego habría que coser de cara a Semana Santa.

Este día, tal vez recatando tan señera tradición, y echando las penas a la hoguera, con el buen hacer de Fede y Jesús, dueños del Reca, y toda su fantástica plantilla (publicidad gratuita para que me sigan poniendo buenas tapas, las mejores de Granada) allí que nos plantamos, unos con las perlas de todos los chinos de Granada, otros con metros y metros de tul negro, que dejó sin existencias los comercios del centro. Nos faltaba el río, nos faltaba la Alhambra de fondo... pero el espíritu era el mismo. Y era el primer año... y estoy seguro que el año que viene ya promete, pues las costuras de los trajes, como veréis, fueron de lo más elaborado.

Por supuesto, la difunta, a la que todos lloramos mientras estaba en pública exhibición... eran tan bonita... nos dió tantas alegrías... y la japuta se fué sin dejar herencia!. Por cierto, hacer notar que vivió bien en vida, esa operación de labios reciente le sentó de bien...


Y el evento, de lo más animado y concurrido. Allá al fondo, podéis ver a nuestro pescadito en sus años mozos, y más abajo, la galería de personajes que lo lloramos.


La anfitriona y viuda por excelencia, con un aire a lo Marujita Díaz, que nos hizo las delicias a los allí presentes...


La viuda asesina, que por la pena no pudo encender los fogones esa noche... aunque aquí se le veía contentilla... ya se sabe de los cambios de humor de todo psicópata, aunque por suerte, esa noche se le olvidó el hacha en casa.


O la viudita alegre... que con esa sonrisa tapó el luto de los allí presentes. ¿Habeis visto que sonrisa? alegría para todos!


Tuvimos ejemplares de viudas fashion, como no...

















Aunque para fashion, la de las perlas chinas, a lo Sarita Montiel (si estaba Marujita, ella no podía estar lejos), o la fantástica y glamourosa Jackie Kennedy, muy compungida ella y afectada, que no cambió en toda la noche el semblante. Que pena...

Bueno... y estaba yo, que como viudo amante discreto de la señora sardina, tuve que disimular mi luto y dejar la pamela en casa. Ya se sabe luego lo que las malas lenguas sueltan por ahí.


Hasta todo un señor obispo, como merecía la ocasión, que ceremonió y bendijo los restos con mucha agüita bendita.


Aunque a algunas parece que el sastre les jugó una mala pasada, mi pobre Maria Jesús... que el color del sombrero era más propio del Cristo de los Gitanos... Pero ella está divina se ponga lo que se ponga, y gracias a su cámara tenemos este reportaje. ¿Y veis como Jackie ni se inmuta? Igualita en todas las fotos.


No faltaron guapos que amenizasen, como Juanje, que se pasó un rato a alegrarnos ^^, con esa carita que tiene... o alguno que otro que de tanta pena, perdió hasta la camiseta (y no pongo foto porque como no lo conozco... vayamos a tonterías... pero os puedo asegurar... que qué alegría!)



Y todos en comitiva, con mucho llanto y mucho cachondeo, paseamos a la muerta por los alrededores, para hacer pública potestación de fé de lo mal que nos dejó... como se puede ver en las caras. Y a la hoguera fué, y ahí se quedó, espetada con los malos tragos de este año. Descanse en paz, que en paz y contentos nos quedamos.

sábado, 17 de marzo de 2007

tiempo relativo

Es curiosa la sensación que uno mismo tiene del paso del tiempo. Hay días que vuelan, y días que se hacen eternos. Semanas y meses pasan, más o menos rápido o lento, y esta sensación no depende de segunderos, cuyo ritmo es constante (o eso parece), sino más bien del reloj interno que cada uno llevamos dentro. Misterios del ser...

Estos últimos meses, en mi vida, todo va muy deprisa. Casi sin darme cuenta, para mí que fue ayer cuando hablaba de las tardes de invierno en Granada, y ahora me asomo a la ventana y contemplo el radiante cielo de Granada, los ensayos de los costaleros de la cofradía de mi calle, ante la llegada de la Semana Santa, muestras de la llegada de la primavera. Los días se van haciendo más largos, el sol empieza a lucir espléndido, todo muy rápido.

Dicen que esa rapidez del tiempo es porque uno se encuentra bien y feliz. Puede ser. Yo uno a este hecho las consecuencias que conllevan mantener una relación a distancia. El carpe diem se modifica sustancialmente, para convertirse en un "exspecto diem" (algo así como aguardar el dia). Esperar el día para estar con el ser querido, vivir las horas intensamente, y ver... lo rápido que pasan, para volver al tiempo de espera del siguiente momento. Esta discontinuidad a veces no se lleva bien, pero hay poco que hacer. Mejor eso que nada.

Este fin de semana tocaba quedarse solo. La espera esta vez se alarga varios días más. Manu ha ido a Algeciras y yo, tras la decepción inicial de no verlo este fin de semana, me he tomado la situacion en plan positivo. Un fin de semana para mi solo, para ordenar pensamientos, ideas, hacer un parón en esta vorágine de relación que tan rápida y discontínua va. Estos parones repentinos son buenos; además de cambiar la rutina del plan fijo para el fin de semana, hace que las ganas de verlo y sentirlo aumenten. Y tengo que acostumbrarme, a fin de cuentas, casi todas mis relaciones han sido a distancia, y esta sin duda es en la que más veo a la pareja.

Toda esta introducción viene a cuento de mi plan para hoy sábado. Llevo varios meses escribiendo cosas en este blog, y aún no había hecho referencia a la que, sin duda, es mi película favorita, esa que perfectamente he podido ver más de cien veces, y aún la sigo poniendo, le sigo descubriendo cosas nuevas y en cada momento me dice algo diferente.

Hablo de "Piedras", gran película del malagueño Ramón Salazar, estrenada un 8 de febrero hace ya cinco años, y que, desde que asistiera a su estreno de Granada, acompañado de Diego, mi primer y más duradero novio, no he podido dejar de ver hasta ahora. Para quien la haya visto y sea receptivo a todo lo que en ella se cuenta, sabrá de lo que voy a hablar. Para quien no la haya visto, ya está tardando en ir al videoclub más cercano. "Piedras" es, más que una película, una sucesión de momentos, historias entrelazadas, cada una con sus caracteres, son muchos mensajes. Es una película coral en la que hay tanto contenido, que dificilmente alguien, cuando la ve, no perciba algún paralelismo con su vida, con su ser, con sus recuerdos.

En mi caso, después de cinco años, la he tenido siempre presente, desde la primera vez que la vi, y todo lo que viví en años posteriores, me ha abierto los ojos en unos momentos, me los ha hecho cerrar de emoción en otros. he llorado mucho con ella, si, más que con la película, con la interpretación en mi vida que yo hacía de cada escena. Parece mentira que un guión pueda dar tanto de sí.

Y hoy toca verla de nuevo, me ha surgido esa necesidad. No es que sea mi Biblia y conforme a ella actúe, no, no soy tan friky, pero si que me gusta ver cómo evoluciono, desde la última vez que la vi, hace ya tiempo, o de las anteriores veces en estos cinco años (ya dije antes que han sido muchísimas veces).

Para abrir boca, dejo aquí enlazado el monólogo más sublime de la película. No voy a hablar de la fantástica interpretación del reparto, todo de lujo, pero este momento de Najwa Nimri es, para mí, de los mejores que he visto nunca en ningún cine. Decir también que la banda sonora acompaña bastante bien en todo momento. Disfrutadla, como yo lo haré.



viernes, 16 de marzo de 2007

esta noche

Música: Una noche - Alejandro Sanz feat. The Corrs (Duetos)

Estremecedora, sublime la interpretación de The Corrs.... de saltarse las lágrimas, y una de mis favoritas para todos los tiempos... sin palabras



jueves, 15 de marzo de 2007

¡¡Es mi vida, y ahí
no debe meterse nadie!!

Inmaculada Echevarría
Descansa por fin en paz


miércoles, 14 de marzo de 2007

para tu amor

Música: Para tu amor - Juanes (Mi Sangre)

Allá por octubre, y por temas de trabajo, tuve la inmensa suerte de realizar mi primer viaje transcontinental, nada menos que a Colombia. Coincidió justo con una de las encrucijadas en que te coloca la vida, en las que andas perdido y ahogado. Este viaje fue, digamos, una tabla de salvación, ya no sólo por el hecho en sí de salir de mi ciudad, que tantas veces me ahoga, sino sobre todo porque, en los ocho días que allí pase, experimenté una de las vivencias más enriquecedoras de mi vida, por el país, por su gente, por la gente que conocí, por el choque cultural, porque es hispanoamérica, la tierra donde a España nos consideran la "patria madre" y a la que tan poco miramos... y de la que hay mucho que aprender. En ocho días cambió mi percepción de muchas cosas, y vine con una sonrisa en el rostro, cansado y en cierto modo transformado. Adoro Colombia. Es algo que me repito hasta la saciedad, y quiero volver. En ningún sitio he sentido tanta calidez humana, tanto respeto, tanto optimismo... En un país en el que han sufrido más de 40 años de guerra, en el que actualmente las diferencias sociales son bastante acusadas, donde el "dolor de Colombia" como tituló Botero a su más afamada colección de obras está más que presente en cada uno de sus habitantes, que guardan para sí alguna historia, si algo lo caracteriza, es una sonrisa, sonrisas que te llegan al alma.

Durante el viaje de vuelta me acompañó, como no podría ser de otro modo (friky musical ecléctico que soy yo) la música de Juanes, y en concreto esta canción, que cuando vine, no tenía a quien cantar, y ahora que lo tengo, se la grito a los cuatro vientos. Le debo tanto a Colombia...



miércoles, 7 de marzo de 2007

here with me

Música: Here With Me - Dido (No Angel)

Un nuevo periodo de escasez creativa y falta de ideas, lagunas mentales y encrucijadas. Y un temazo musical... sonidos del nuevo milenio que se quedarían ahí, justo cuando entró el nuevo milenio, musicando amaneceres de verano en soledades compartidas. Tan lejos y tan cerca.