domingo, 28 de octubre de 2007

yo procrastino, tu procrastinas... (y 2)

Al hilo de la entrada anterior.... tres meses y medio sin aparecer por estos lares es demasiado tiempo. No es que no haya cosas que contar, las hay, y muchas, buenas y malas, como los días que han transcurrido en este tiempo. Pero como padezco de vaguitis acumulativa, esto es, que cada día que pasa sin publicar algo se acumula la pereza en mi, hago borrón y cuenta nueva, dejo los recopilatorios para las memorias de unos pocos, y como hizo Fray Luis de León tras salir de la cárcel, dirigiéndose a sus alumnos, invoco un "como decíamos ayer" para no desaparecer en la inmensidad de la blogosfera.

Aunque para los inconformes, solo diré que todo va bien. Nada más.

Y como tampoco me apetece enrollarme demasiado, más que nada porque es domingo después de un cambio de hora, con lo que a mi me afectan, dejo dos perlitas del youtube, lo más destacado de esta mañana (y girando las tuercas, de estos meses).

Una, este vídeo que encuentro, tras estar buscando una canción de Kiri te Kanawa, de su disco Maori Songs (no encontrada, por cierto) y enlazando enlazando entre los melódicos, termino con Liza Minelli y la tristemente desaparecida "voz", Luciano Pavarotti, cantando la para mí canción de los finales (la que ponen en Fondo Reservado las noches de parranda sustituta del "vamos a la cama") que tan buenos recuerdos atesora (y algunos desagradables para la vista también). Debo decir que este vídeo me pone, no tanto como las últimas de Ranging Stallion que me he "zampado" delante del ordenador, lógicamente.... pero me pone :)





Y el otro... una reflexión. Recientemente nos hemos tragado Manu y yo todas las temporadas de Ally Mcbeal en nuestras interminables sesiones de sofá, y en algunos capítulos, hacía aparición este cantante, Josh Groban, de voz magistral y preciosa, que me cautivó en el primer capítulo en el que apareció. Lo que es no fijarse en las cosas, nombres y caras (defecto mío desde siempre) y lo peor... lo que es en determinados momentos, no escuchar y prestar atención a los gustos musicales de otros. Si hace un par de años me dicen que iba a estar colgando esto aquí... sencillamente me hubiese echado las manos a la cabeza. La gracia de todo esto es que no ha sido hasta esta mañana cuando, viendo este vídeo, no he relacionado hechos. Propósito para el nuevo curso, intentar ser un poco más receptivo. La canción es una joya y la voz, una delicia.



3 comentarios:

dequesi dijo...

Se te echa de menos, aunque no tanto en el mundo virtual como en la vida real. ¡Perdido! ;-)
Besos.

gaysinley dijo...

Que bien, saber de tí, de nuevo... Gracias por la joya musical que nos has dejado colgado, no lo conocía, simplemente delicioso. Bss

Anónimo dijo...

vuelvo el jueves!